El instante es una incitacion a la vida.
Hace tiempo, gracias a las horas en silencio, quizás pude ver que tenía un camino mas profundo alejado de la realidad y de la sociedad. Y por eso decidí encerrarme en mi mismo y buscar mis propias respuestas. Durante mucho tiempo he estado encerrado en mi individual e independiente realidad, en mis pensamientos, en mis sentimientos, en mí. Se pueden elegir dos caminos; exteriorizar ideas guiadas por la lógica o la razón con las demás personas (ser más sociable) dentro del marco de la comunicación y, otro es el camino que pueda llevar alguien ascético, introspectivo o abstracto, más cercano a la fe que a lo racional. Decidí seguir ese camino (mas fe y menos razonamientos) porque lo demás no valía ni una mierda y no tenia importancia, yo elegí darle sentido a tanto vacío. Buscar el sentido de la vida, el día a día, ¿Qué es lo que nos mueve a vivir? ¿Por qué razón vivimos? ¿Por qué el por que? Dudas que acechan en cada esquina cuando todo son calles vacías. Muchas preguntas que al final no tengo respuesta, aunque, desde tiempos clásicos, filósofos antiguos y contemporáneos, han dado respuestas a estas preguntas, no son respuestas eternas, ni absolutas porque durante la historia ha existido personas que se replantean las respuestas de los antiguos para darle un nuevo significado, mas actual y con sentido propio para cada época y para cada forma distinta de ver el mundo a lo largo de la historia. Si tuviera que poner en este artículo el sentido de la vida, una tarea tan misteriosa e inalcanzable hasta los ochenta años de edad, en algunos casos, no sabría ni pretendería explicarlo con palabras, pero, si que pondré un boceto actual. Creo en esto, en que nací en este mundo llamado planeta tierra (evidentemente si no quien cojones escribiría esto) para recibir una educación y poder vivir independientemente con trabajo, divertirme, enamorarme, sufrir, odiar, tener hijos o no, posesiones y después de haber vivido todo esto y seguramente haberlo escrito para pasado un tiempo recordarlo, llegara un día que no se cual va a ser y, moriré. Hay que vivir sin demasiado apego ni demasiada aversión. Este es mi dogma.
0 comentarios